jueves, 29 de enero de 2009

CUANDO NOS QUEDAMOS SIN PALABRAS

¡Malditos siniestros de tráfico! Están ahí, junto a nosotros, y apenas les damos importancia. ¡Si!, ¡Si! ya se que hablamos mucho sobre ellos, pero al final siempre pensamos que sólo les ocurren a los demás.
Hoy un gran amigo, Julio Magadán Magadán, ha perdido a su padre. Un mal llamado accidente se cruzó en su camino hace unos meses y, aunque nunca se perdió la esperanza, al final llegó el desenlace al que nadie nos queremos enfrentar. Ahora nos quedamos sin palabras, no sabemos que decir, nos abruman los sentimientos, pensamos que hemos hecho para merecer esta suerte, por qué nos ha tocado a nosotros/as… nos hundimos en el dolor.
Pero en el tráfico no hay justicia, no entiende de víctimas ni de culpables y cuando se produce un accidente nos arranca a los seres más queridos sin piedad, y con ello se lleva una parte de nosotros/as mismos.
Ánimo amigo, eres el referente en el que muchos/as nos hemos fijado para luchar contra los siniestros de tráfico, sabemos que lo superarás y nos ayudarás a continuar trabajando para que nadie tenga que volver a sufrir lo que tu estás viviendo.Un abrazo.
Julio Fernández Díaz
APEMEV CANTABRIA

domingo, 25 de enero de 2009

La Educación Vial es cosa de TODOS

Hace años las Policías Locales, dentro de su contexto Municipal vienen trabajando día a día entre sus conciudadanos por una apuesta de la Educación en la Seguridad Vial.
Desde hace más de tres décadas, monitores de muchas Policías Locales colaboran con los profesores/as de los colegios e institutos dando clases y charlas formativas de Educación Vial a niños/as y adolescentes.
Pero… ¿qué se entiende por Educación Vial?
Para la mayoría de personas e instituciones es la formación de futuros conductores, y va básicamente dirigida a niños y adolescentes en edad escolar, donde se les enseña normas y señales que luego ponen en práctica en los Parques Infantiles de Tráfico.

Al principio de los años noventa, en Cataluña, varios monitores de Educación Vial de distintas Policías Locales nos ponemos en contacto para trabajar en común, intercambiar experiencias, desarrollar nuevos programas y formarnos como educadores. Dos años más tarde se crea el Grupo de Monitores de Educación Vial de Cataluña, hoy Asociación para el Desarrollo de la Educación Vial “ADEViC” y en el 1999 la Federación Estatal que aglutina a otros monitores del resto del Estado, con objetivos muy concretos y que entiende que la Educación Vial debe ir dirigida a todos los ciudadanos en general, siendo su base la propia protección, el respeto a todos los demás usuarios de la vía pública y el cumplimiento de las normas y señales de tráfico vigentes.

Entendemos que la Educación Vial es algo más que el exacto cumplimiento de la normativa en torno al tráfico. Es una enseñanza encaminada al desarrollo de habilidades cognoscibles, afectivas y conductuales, relacionadas dentro del mundo vial. Hay que destacar que en un programa de Educación Vial el contenido debe estar pensado para trabajar desde unos conceptos (semáforo en rojo = no pasar), unos procedimientos (que el ciudadano no pase) y unos valores (que la persona tome conciencia que lo que ha hecho es lo correcto).
El objetivo final es que una vez aprendidos los conceptos, adaptados los procedimientos y asumidos los valores, los usuarios de la vía, tengan la capacidad de reflexionar sus actos fomentando una actitud más positiva y segura, a la vez que sean capaces de analizar los problemas de su entorno bajo sus propios criterios y promuevan una reflexión a todos los profesionales e instituciones implicados en el tráfico.

Pero todo esto no es suficiente si se hace individualmente.

Imperiosamente se debe contar con los padres, porque no hay que olvidar que ellos forman la parte más importante de la educación. Por eso en la familia se debe exigir una conducta responsable y de respeto para crear hábitos seguros, participar en las AMPAS colaborando en actividades conjuntas donde puedan opinar, debatir y reflexionar sobre su conducta y la seguridad de sus hijos.

Es importante la implicación de los centros escolares, introduciendo programas de Educación Vial en el currículum escolar del centro, aplicarse como eje transversal en primaria, a través de créditos en secundaria y actividades, charlas o “Treball de Reserca” en bachiller, donde los profesores se motiven, participen y se impliquen en las actividades, al mismo tiempo que sean ejemplo para sus alumnos sobretodo al entrar y salir del centro y en las actividades extraescolares.

Es necesaria la unida de todas las Asociaciones e Instituciones Particulares, comprometidas con la Educación Vial (Locales, Autonómicas o Estatales), para crear una mesa de trabajo donde todas puedan colaborar, incidir y participar en proyectos de diseño de Planes Estatales o Municipales de Educación Vial, en colectivos educativos, profesionales y sociales en general.

Es hora que la administración pública regule o legisle un Plan de Educación y Formación Vial, encaminado a garantizar la Seguridad de los Ciudadanos, concretando quien, como y donde desarrollarlo.

Finalmente, i sobre todo, CREEMOS EN LA EDUCACIÓN POR LA MOVILIDAD SEGURA, y creemos en la educación como forma necesaria y complementaria del sistema sancionador, que por sí solo no es capaz de cambiar actitudes.

Jose Maria Navarro Gonzalez
Presidente de ADEViC
Asociación para el Desarrollo de la Educación Vial en Cataluña